CAPÍTULO 16 [LA MALDICIÓN]

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Pasaban los días y poco a poco nos íbamos acostumbrando a nuestras nuevas skills. Felurian ya era un tanque en todos los sentidos, se rodeaba de mob los cuales a duras penas le hacían daño, ella solo sonreía y con sus habilidades de escudo despejaba todo.

Any estaba probando haber sido una gran adición a nuestro grupo, nos facilitaba mucho el trabajo ya que nos daba buffs elementales para ser más eficaces al momento de pelear, además de que podía castear y correr al mismo tiempo. Kenzaiten, se había abocado a realizar pociones. él y su compañero vanilmirth, el cual fue bautizado como Valefor, su primer homúnculo, atacaban juntos y así eran más fuertes.

Yo, me enfoqué en ser el mejor support posible, no tengo mucha experiencia en esta rama, pero en mi recorrido como acolyte he aprendido muchas cosas. Mis amigos ahora son capaces de resistir mucho más en combate gracias a mis nuevas skills, además de que mi curación es más eficaz.

Después de lo sucedido en Payon, decidimos no volver más y emprendimos camino a Lutie. Se acercaban las fechas navideñas y queríamos viajar a un mapa acorde, además podríamos sacar bastante zeny en la fábrica.

No quería usar warp portal porque no había viajado nunca a este mapa y desde el incidente de Moonlight era más precavido. Pero todos los lugares que había visitado se guardaban y con solo imaginarlo podía crear un portal a ese lugar y esto nos sería de muchísima ayuda.

Any estaba muy feliz mientras caminábamos, nos había contado que era su época favorita del año y ahora se sentía muy segura con nosotros. Felurian, sonriendo, tarareaba una canción navideña.

Estábamos a un mapa de llegar a Aldebarán, cuando fuimos interceptados por un rogue, un hunter y un assassin que miraban a Kenzaiten desafiantes -Tú eres el de la profecía, hasta la Valquiria te reconoció, debemos acabar contigo antes de que vuelvas a causar calamidades-.

-¡No sé de qué hablan!- dijo Kenzaiten -además ¿cómo saben que provoqué calamidades si todos fuimos transportados al mismo tiempo a este mundo?

-No sabemos, pero es lo que dicen y no queremos correr el riesgo de morir por tu culpa.- respondió el assassin que se veía un poco confundido por la pregunta de Kenzaiten.

Entonces, el Hunter hizo el primer movimiento: -¡Double Straff!- gritó mientras apuntaba a nuestro amigo. En un segundo y sin pensarlo tiré Pneuma para protegerlo del ataque. En un instante buffeé a todos mis compañeros para estar preparado.

-Confiamos en nuestro amigo, y no dejaremos que le toquen un pelo. ¡Váyanse o afronten las consecuencias!- les grité furioso por su ataque, pero ellos seguían empeñados en hacernos daño. Any y yo usamos skills para detectar al rogue y al assa que usaban skills para esconderse y evitar ser sorprendidos. Tiré pneuma por todos lados, así el hunter no tendría mucho ángulo para acertarnos. Any comenzó a usar safety wall en Kenzaiten y Felurian usó sus buffs de escudo. Cuando logró acercarse el rogue usó strip weapon contra Felurian quitándole su espada, pero Valefor la mascota de Kenzaiten, atacó al rogue. Mientras este recibía daño, Any terminó de castear Frost driver y lo congeló. El assasin dió un Sonic Blow sobre Felurian olvidando por completo el Reflect shield, ocasionándose el mismo una herida muy profunda en el abdomen,

al ver esto Kenzaiten uso cart revolution empujando a los demás, se acercó con cuidado al assasin y vertió una poción sobre la herida ayudándolo a sanar.

-¿Por qué me ayudas?- inquirió el assassin confundido.-Porque no soy la persona que creen.- respondió Kenzaiten tranquilamente.

El resto de ellos bajó sus armas y pidieron disculpas -De aquí en adelante tendrán que cuidarse mucho las espaldas, no somos los últimos que intentarán atacarlos. El rumor se ha esparcido de que su llegada es una desgracia para todos los que estamos en este mundo y que incluso la Valquiria le quiere fuera de aquí o eso interpretaron los que estaban presentes cuando habló con ella- dijo el assa señalando a Kenzaiten con la cabeza -otros también intentarán deshacerse de la supuesta maldición-.

Agradecimos sus advertencias, los curé y seguimos nuestro camino con algo de temor, no sabíamos lo que nos esperaba a causa de esta supuesta maldición.

[FIN CAPÍTULO 16]